* Ingredientes:

Un pack de masa quebrada refrigerada

– Para el relleno:

1. 200gr de bacon en dados
2. Una cebolla pequeña picadita
3. 75gr de queso gruyere rallado
4. 4 huevos L
5. 200ml de nata de cocinar
6. 100ml de leche entera
7. Pimienta negra recién molida

* preparación:

Lo primero que tenemos que hacer es dejar la masa un ratito fuera de la nevera para que cuando la estiremos en el molde no se nos rompa, pasado ese tiempo la ponemos en un molde redondo (de silicona o de metal engrasado) pinchamos para evitar que se nos inche, cubrimos con papel de hornear y unas legumbres para que haga de peso, lo introducimos en el horno a 180º unos 30 minutos para que se nos hornee y no nos quede crudo cuando lo horneemos todo junto, mientras hacemos el horneado blanco preparamos el relleno poniendo al fuego el bacon en una sartén hasta que se nos empiece a tostar en ese momento añadimos la cebolla y lo pochamos junto, mientras en un recipiente alto y con la ayuda de una batidora mezclamos los huevos con la leche y la nata, acabamos por añadir la pimienta y reservamos. Ya con la base cocida ponemos dentro el bacon con la cebolla cubriendo toda la base añadimos el queso y cubrimos con la mezcla del huevo, lo llevamos al horno para terminar que de preparar nuestro pastel unos 30 minutos pasado ese tiempo ya debería estar cuajado así que comprobamos si esta cocido pinchando en el centro y listo cejamos que se temple y a comer.

Nota: comerla templada mejor que fría ya veréis que rica esta 😉